Luz...luz divina...
que calma el tormento del alma
que me lleva a danzar con la luna
saboreando sin límites la locura
Locura...locura divina...
que dibuja sonrisas
que me lleva a otros mundos
que me lanza a la mar con sus caricias
no te tengo miedo, soledad...
soledad...soledad divina...
tan odiada por algunos
tan buscada por unos pocos
¿locos?
no! no lo somos!
y aunque no quiera te canto
y aunque no quiera te amo
entre notas de incienso y humo blanco...
despacio...caminando...
en una mano esperanza
en otra tormento y llanto
en el corazón un deseo
no existe el tiempo
en este mundo negro...
sangro...
por una sonrisa un mundo cruzaría
por ver tus ojos vendería mi vida
por tocas tus manos y morir en tu abrazo
me arrancaría el corazón de cuajo...
sangro...
y bailo...
danzando con las sombras me pierdo
entre almas que buscan el consuelo
alimentando a los hambrientos...
brindándoles sueños...
y a pesar de todo,
sigo creyendo en el amor eterno
y cada noche, la pequeña alza el vuelo
hasta llegar a la mar
donde encuentra la calma
y con las estrellas habla...
oh lucecita! no me dejes sola
ahora no...
cuando más te necesito
cuando más te grito
pues se me torna el cielo negro
y necesito de tu guía
ay mi lucecita! no me falles
nunca lo hiciste...
no lo hagas ahora...
las nubes chocan...
se escuchan los truenos
y el manto oscuro del sin consuelo
ay mi lucecita!
no sé si seré tan fuerte
no dejes que llegue a perderme...
viene el verdugo...
todo se va a romper...
ay mi lucecita! sálvame!
no me dejes caer...